• La dinamita volverá a explotar en los cuadriláteros mexicanos
Por: Krudemmon
Después de una etapa de transición y tras combatir fieramente algunas problemáticas de carácter personal, Lola “dinamita” González regresa al pancracio mexicano, convencida de su amor por la vida y la lucha libre, Lola, una de las máximas campeonas de nuestro país promete mucha entrega y disposición. Entre sus proyectos está el dirigir a una nueva camada de luchadoras, para que se conviertan en dignas representantes del catch nacional y que, al igual que ella, logren conquistar el Japón.
Todo comenzaría en Cd Juárez, Chihuahua un 2 de Marzo, María Dolores González sería el nombre de la mujer que en 1975 a la edad de 16 años debutaría como luchadora profesional, acompañada de Rocio Urbina, donde enfrentó a Esthela Molina y Marina del Rey, entrenada por el “ave de las tempestades”, don Gori Guerrero, Lola González conocería también a unos jóvenes Mando, Héctor y Chavo Guerrero sr, además de un entonces adolescente Eddie Guerrero.
“Mis más sinceros y profundos agradecimientos para el señor Guerrero y su familia, siempre me apoyó, inclusive cuando mis padres no querían que yo me dedicara a esto, el señor Gori habló con ellos para obtener su autorización”, la pólvora de la dinamita comenzaba a encender. La técnica de la jovencita González fue captada rápidamente por muchos promotores, al poco tiempo de su debut, Lola se encontraría ya de viaje rumbo al Cd de México, desarrollaría intensas rivalidades con La Monster, Vicky Carranza y Zuleyma, quienes probarían el poderío de Lola la grande y pagarían con su cabellera la audacia de enfrentarla.
Con su carrera viento en popa, viajes a gran parte del mundo y mucha energía, llegaría la consagración de Lola la mamá, “Mi primer hija fue una auténtica bendición”, aunque aceptaría que fue muy irresponsable con su salud “A los tres meses de dar a luz ya estaba luchando nuevamente, estaba tan acostumbrada al movimiento que no me podía permitir el parar”. Los gajes del oficio de un luchador incluyen una intensa actividad de organización “Había ocasiones que con tanto boleto de autobús o avión, uno pierde la orientación de donde se encuentra, o qué día es”
Sin embargo no todo sería miel sobre hojuelas, la derrota también forma parte de la victoria “Cuando perdí mi cabellera con Rocío Urbina, tuve que asimilarlo lo más pronto posible y continuar”, la constancia le entregaría otro trofeo: la máscara de la Pantera Sureña, y tiempo después su cabellera “Son tantas veces las que uno lucha, que muchas veces estos triunfos no pensamos que sean recordados”. Lola González incursionó también en el séptimo arte en la película "Octagón y Atlantis la revancha”, además de integrar la caravana AAA en sus primeros años de vida.
La actualidad de Lola la campeona es un nuevo reto, un nuevo horizonte, se declara aficionada a la lucha libre femenil actual y respeta a muchas de sus compañeras “A Lady apache, Marcela entre otras, merecen todos mis respetos”, aunque tristemente acepta que en muchos luchadores no existe el compromiso que se tenía antes con el público “Creo que ahora es más fácil que se dejen las plazas tiradas, antes ni pensarlo”. Lola está de regreso, presentándose poco a poco en eventos de carácter público y también como maestra “Invito a todas las chicas que quieran entrenar conmigo estamos en el gimnasio nuevo Jordán, muy cerca del metro Salto del Agua”
La dinamita esta lista para explotar de nuevo, Lola González, un ejemplo de sencillez, disciplina y profundo amor por la vida.
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